domingo, junio 17, 2012
Unknown
Hoy te vi.
Hoy estuviste frente a mí y me abrazaste, alegría y tristeza fue lo que sentí.
El corazón se me cargó de emociones y me contenía para no derramar ni una lágrima.
Hoy estuviste conmigo, pero ya no es lo mismo, y nunca será igual que antes...
Tu voz que me desgarra el alma cuando la escucho, cuando me hablas...
Entonces veo tu cara y me duelen los recuerdos, me duele lo que el tiempo se nos ha llevado.
Tal vez tú nunca me leas, o tal vez nunca te diga nada.
Pero hay algo que es inevitable, y es que todos y cada uno de los días de mi vida, pienso en ti.
Y me duele el saber que estás, pero a la vez no.
Hoy seguramente me acostaré, y entre mis pensamientos estarás tú...
Mañana me levantaré y trataré de hacer como si no te hubiese visto hoy.
En un intento fallido trataré de engañarme sólo por ese día.
Y aunque tú no lo sepas, yo te lloro en silencio.
Porque te extraño, porque ojalá estuvieras conmigo... como antes, y como nunca fue...
Hoy te vi, y traté de no verte a lo ojos.
Sencillamente no podía, o me descubrirías entre lágrimas.
Pero aunque no te diste cuenta, lloré, y me partió el corazón el volverte a ver.
Conversamos como si nada ha pasado, como si el pasado, realmente se fue.
¡Y sí, ya pasó! Pero yo te llevo conmigo y todo lo que hemos vivido.
Fue triste el haberte tenido tan cerca, y te tuve tan lejos...
¡Y Te Amo!
Aunque en un mañana te vuelva a ver y me duela el alma, también Te Amaré...
Aunque no haya sido el ser más perfecto para ti, yo siempre Te Amaré...
Porque te llevo conmigo.
Porque siempre has sido, eres y serás parte de mí.
Hoy me alegré y lloré... porque te vi.
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